No existe ningún disco de vinilo que se reproduzca a 32 Revoluciones por Minuto, ¿entonces por qué escoger este nombre para título del blog? Pues en realidad todo surgió muy rápido, fue un chispazo en la noche de un día entre semana, y sin embargo no fue algo radical pues ya tenía el proyecto de cambiar el nombre del blog cada año.
Lo primero que pensé fue en buscar una imagen de un disco de vinilo en la red, pero no lo hice por dos razones. La primera es porque trato de ofrecer material original, la segunda porque todos las imágenes de los discos que encontraban eran negros, y yo no quería tener un header negro.
Todavía tengo varios discos de vinilo, aún los escucha la familia, hay desde boleros hasta jazz, pasando por el música pop de la década de los ochenta; pero hay un par de discos que recuerdo más claramente: uno de Lola Beltrán en el Palacio de Bellas Artes (¡grande!) y otro de Odisea Burbujas.
Todo se debe a una tienda de discos a la que me llevaban mis papás cuando yo tendría unos siete años, y es que mis padres en aquellos años eran buenos amantes de la música, yo crecí escuchando muchos boleros. Esta tienda creo que estaba por el metro Zaragoza o Aeropuerto, quizás se trataba de un Discolandia, imposible saberlo por mi mismo, recuerdo claramente que la tienda estaba decorada con discos traslucidos: azules, rojos, verdes que colgaban del techo.
El disco que elegí fotografiar para el header del blog es el 'disco aventura' de 'Odisea Burbujas', serie de televisión que tuvo éxito allá a principios de la década de los ochenta, este era uno de mis discos favoritos durante la infancia, ahora lo es de mi sobrina. Hice varias tomas hasta que me quedé conforme con la apariencia del plástico traslucido rojo, curiosamente la foto elegida es una toma de larga exposición, hecha casi artesanalmente, pues la habitación estaba totalmente oscura y encendí la luz apenas una fracción de segundo, el resultado me gustó bastante.
Evidentemente una de las razones por las que escogí este disco es el color, verlo girar en el tornamesa de la consola de mi casa mientras el sonido de Juan García Esquivel se esparcía por los altavoces de la consola era un deleite. Aún lo sigue siendo, espero que usted, lector, conozca a Juan García Esquivel, vale mucho la pena escucharlo, aunque estoy seguro que ya lo ha hecho, pero seguro lo ignora, pues su música además de vanguardista fue muy recurrida por la televisión de aquellos años.
Por último les muestro el otro disco que me fascina por su cromatismo, el de Lola Beltrán; por supuesto la música también me encanta, la canción de La Borrachita o La Feria de las Flores ha sido una de mis favoritas de siempre.
Bien, he ahí la explicación del header de este 'nuevo' blog. Yo lo invito a que se recueste en su sillón favorito, le pido deje caer una mano y con la otra sostenga una copa de tibio cognac, esté atento para oír caer suavemente la aguja sobre la espiral de vinilo, ajuste la velocidad a treinta y dos revoluciones por minutos y escuche...
Evidentemente una de las razones por las que escogí este disco es el color, verlo girar en el tornamesa de la consola de mi casa mientras el sonido de Juan García Esquivel se esparcía por los altavoces de la consola era un deleite. Aún lo sigue siendo, espero que usted, lector, conozca a Juan García Esquivel, vale mucho la pena escucharlo, aunque estoy seguro que ya lo ha hecho, pero seguro lo ignora, pues su música además de vanguardista fue muy recurrida por la televisión de aquellos años.
Por último les muestro el otro disco que me fascina por su cromatismo, el de Lola Beltrán; por supuesto la música también me encanta, la canción de La Borrachita o La Feria de las Flores ha sido una de mis favoritas de siempre.
Bien, he ahí la explicación del header de este 'nuevo' blog. Yo lo invito a que se recueste en su sillón favorito, le pido deje caer una mano y con la otra sostenga una copa de tibio cognac, esté atento para oír caer suavemente la aguja sobre la espiral de vinilo, ajuste la velocidad a treinta y dos revoluciones por minutos y escuche...
Disfruto mucho las propuestas originales. Como leer a Girondo quien quiebra y contraquiebra sus relatos (quizá una herencia de los formalistas - Maiakovsky diría-).
ResponderBorrarEsa imagen que se repite invita a la pausa y a la ambientación... ese vino, esa canción... casi que son materiales.
...qué rico está y qué buena música!
Ja, de hecho se me pasó poner que eran las distintas tomas que hice del disco =P aunque claro, también tiene una intención esa repetición.
BorrarGracias por leer!
Esquivel, un grande, lo escucho casi todos los días! De hecho hoy día me refinaba unas cuantas rolitas de el, y si creo seria muy difícil encontrar a alguien que no haya al padre del Lounge.
ResponderBorrarMe declaro adicto al scratch de los LP's, en casa también eran de escuchar mucha música, también boleros, muchos boleros, pero sobre todo rocanroles, swing y musica tropical, desde niño soy fanático de Luis Arcaraz, Glen Miller y Beny More.
Tengo una pequeña discoteca y en mi cuarto de juguetes una tornamesa de esas nuevas, por lo general reproduzco mis Lp's cuando estoy ahi metido... algún día me traeré la consola Stromberg Carlson que hay en mi casa, no la he sacado todavía no vaya a pensar mi Papa que me traigo la herencia antes de que fallezca.
Te conté que también tengo un blog donde comparto música?
Y si los vinilos de colores son demasiado fascinantes.
Sí, yo también tengo a Esquivel en la música del diario, es una maravilla oírlo con unos buenos audífonos, así la música de él realmente te envuelve, te abraza...
BorrarDe rockanroles sólo unos pocos de Ángelica María... y como no!, las tropicales de aquellos años, también tengo discos de Polymarch!
Igualmente tengo mi discoteca, desde hace años me los aparté, aunque me digan que ando quedándome con la herencia, jajaja
Creo que tengo tu otro blog en el blogroll de mi blog (ja!), ya lo he visto, lo malo es que desde el trabajo no puedo descargar cosas y luego en la noche en mi casa se me olvida entrar a tu blog... pero prometo hacerlo un día de estos, he visto un par de cosas que quiero bajar.